Mucho nos cuenta la historia sobre la tiranía durante el tercer Reich, dentro de los libros en los que hablan sobre las cámaras de gas y los crematorios existentes en los campos de concentración se hace mención sobre el químico utilizado por los alemanes en estos campos, este químico es el famoso ”Zyklon B” o ácido cianhídrico. Para adentrarnos en este compuesto se debe saber principalmente que debe estar en estado sólido para poder ser transportado en latas, este mismo a los 26°c entra en estado gaseoso (estado que se debe utilizar para asesinar por inhalación y/o contacto) y para “trabajar” con este químico en estado gaseoso es necesario un complejo sistema de ventilación dentro de la cámara donde se aplicará con varios filtros herméticos y chimeneas de 12m de altura como mínimo para que el residuo gaseoso más liviano se eleve hacia la atmósfera y con esto aún quedaba volátil la zona de exposición.
Ahora con lo explicado anteriormente podemos explicar el porqué es ilógico que dichas cámaras hayan funcionado, principalmente estos campos de concentración estaban construidos de hormigón, que pudieron ser regaderas o refugios antiaéreos, supuestamente ingresaba una gran cantidad de personas desnudas y se tiraba el compuesto en estado sólido, el mismo que por lógica no podía alcanzar los 26°c para provocar su estado gaseoso el cual es mortal.
Para comprender más sobre estas cámaras es recomendable investigar sobre “el relato de Rudolf Hoss”
Este último fue el comandante de los prisioneros peligrosos en Auschwitz, en su relato menciona que las chimeneas eran aproximadamente de 6 metros y que cada vez que terminaban el proceso, algunos soldados entraban a los 5 minutos y generalmente fumando para retirar los cuerpos, por ende todo el campo hubiese muerto, incluyendo guardias, comandantes, oficiales, prisioneros, todos.
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